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CUADERNOS DE FILOSOFÍA

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3. ASPECTOS FILOSÓFICOS


3.1. La mentalidad prefilosófica

En los albores de la historia intelectual de Grecia, se entrevé toda una serie de personalidades extrañas, figuras legendarias que pertenecen a la clase de los videntes extáticos y de los magos purificadores, que encarnan el modelo más antiguo de "sabio". Sin embargo, el primer "filósofo" no es un chaman. Es un divulgador que extiende a un grupo abierto un conocimiento anteriormente reservado a un solo individuo o a un exclusivo grupo de "elegidos". Por medio de la palabra o el escrito, el filósofo se dirige a toda la ciudad; trasladando el "misterio", al ágora, a la plaza, lo erige en un objeto de debate público, que será rico y fructífero y que iniciará una nueva forma de entender el mundo y al hombre en su relación con él.




3.2. El mito y la razón

Las dos palabras que dan título a este apartado parecen partir en dos etapas completamente distintas la historia de la humanidad. El mito, en un principio, nos retrotrae a tiempos irracionales en los que elementos naturales, como el Sol, la lluvia, o la feretilidad de la tierra o de los seres humanos, así como incógnitas que hoy son exlicadas por la ciencia y que forman parte de los conocimientos mínimos que, se supone, toda persona debe tener, eran entonces profundos misterios que tan sólo unos pocos iniciados podían llegar a comprender o controlar, y en los cuales las divinidades, espíritus o energías de extrañas propiedades jugaban un papel esencial. Los mitos, en este contexto, son aquellas narraciones con las que se trataba de explicar el funcionamiento del mundo o de la sociedad. La razón (de nuevo es conveniente introducir el matiz "en un principio") nos llevaría a una etapa más evolucioinada de la historia humana. Razón, o más concretamente, el calificativo de racional, se asocia a civilización, argumentación, cultura y otros a elementos similares. Mito y razón parecen marcar dos etapas, dos formas de entender el mundo y consecuentemente, dos formas de actuar. El paso de una a otra se dio en la antigua Grecia, de la mano de la aparición de la filosofía y de todos los logros culturales e intelectuales de aquella época.

En toda esta presentación que hemos hecho se están dando por supuesto no pocas afirmaciones que están muy lejos de haber sido empíricamente comprobadas o siquiera argumentadas, empezando por la definición de mito y razón, su total contraste o el salto y ruptura brúsqueda entre la etapa mística y la racional. (1)

Pasemos en primer lugar a considerar con más detalle las caracterísiticas del mito y de la razón, respectivamente, para analizar después qué quiere decir la expresión "el paso del mito al logos" y cómo se efectua este tránsito:

Como características generales del mito podemos señalar:

- Apela a la fe, a la aceptación irracional de ciertas verdades; tiende a la exaltación de la imaginación (sin que sea contrastada con la experiencia), a poner de relieve el valor de ciertos ritos y determinadas normas de conducta y a predicar obediencia ciega a la autoridad.

- Su lenguaje propende a ser un instrumento de dominación que se dirige exclusivamente al conjunto de las personas que participan en determinadas creencias y excluye al resto.

- Se encuentra siempre completo, invariable, definitivamente constituido en sus misterios y en sus ritos.

No obstante es conveniente precisar que se encuentran en el pensamiento mítico formas y niveles diversos y que la palabra "mito" (Mythos) no tenía para los que la empleaban en los tiempos arcaicos el sentido despectivo que tiene hoy, sino que quería decir "palabra", "narración".

La razón , por su parte:

- insite en el valor cognoscitivo del entendimiento y de la razón humana, intenta demostrar las verdades que afirma y procura defender la investigación, la reflexión y el diálogo con el fin de descubrir la naturaleza de las cosas.

- su lenguaje constituye un medio de comunicación, destinado a todos los seres humanos.

- en cuanto supone un esfuerzo racional hacia la investigación de la verdad, no puede encontrarse nunca acabado.

Ahora bien, J.F. Vernant ha indicado claramente que los griegos no habían inventado la Razón, como categoría única y universal, sino una razón, aquella de la que el lenguaje es el instrumento y que permite actuar sobre los hombres, no transformar la naturaleza, una razón política en el sentido aristotélico. Y si tomamos en cuenta el desarrollo posterior de la ciencia (tratados médicos, investigaciones históricas) deberíamos hablar de distintos tipos de racionalidad .

Con la expresión " paso del mito al logos " se quiere designar el origen de la filosofía en Grecia como superación de las formas míticas y religiosas de pensamiento, con lo que se consiguió un pensamiento racional que incluye en su seno tanto a la tanto a la filosofía como a la ciencia. El paso del mito al logos tuvo lugar cuando empezó a cobrar forma en las mentes de los hombres la convicción de que el caos aparente de los acontecimientos tiene que ocultar un orden subyacente, y que este orden es el producto de fuerzas impersonales

Acerca del paso del mito al logos fue célebre la polémica que enfrentó a Burnet con Cornford. Según el primero, la superación del mito y la llegada del pensamiento racional había hecho su aparición de un modo repentino, sin historia previa que investigar, como una especie de "milagro griego" (pero este "milagro" no explicaba realmente nada y, además, mostraba un cierto eurocentrismo al no querer tampoco reconocer las influencias de los saberes caldeos, babilonios, egipcios, etc., sobre los primeros filósofos griegos). Frente a estas tesis, F. M. Cornford sostuvo la tesis que mantiene que la cosmología de los primeros jonios procedía de una reinterpretación y prolongación de los mitos cosmogónicos y teogónicos griegos (Hesíodo y Homero). Cornford concluye afirmando que, en la filosofía, el mito está racionalizado.

Es difícil señalar la frontera del momento en que surge el pensamiento racional. W. Jaeger afirma que tal frontera pasa probablemente a través de la epopeya de Homero, en la que el elemento racional y el mítico están estrechamente compenetrados, y a través de los textos de Hesíodo. No hay, pues, coincidencia entre el comienzo del pensamiento racional y el fin del pensamiento mítico. En efecto, auténtica mitología se encuentra no sólo en las obras de los presocráticos sino incluso en el centro de las filosofías maduras, como las de Platón y Aristóteles. De este modo, mito y razón cohabitan , al menos en la filosofía griega. (2)





3.3. Los "siete sabios" como antecedente de la filosofía

Otro antecedente de la filosofía son las sentencias de los sabios. La denominación de "siete sabios" designa a un conjunto de personalidades históricas griegas, a quienes se atribuye una serie de máximas filosóficas que resumen en buena parte el pensamiento de la antigüedad. Este selecto conjunto incluye tanto a filósofos como a políticos. La tradición de los siete sabios se mantuvo a lo largo de los siglos; así, Plutarco compondría un Ágape para siete sabios . Durante el siglo IV se determinaban como siete sabios a las siguientes personalidades: (3)

- Cleóbulo de Lindos: se le atribuye la máxima que indica "La moderación es lo mejor". Gobernó como tirano de Lindos (se dice que con tanta energía como prudencia), en la isla griega de Rodas, h 600 a.C.

- Solón de Atenas: acuñó, al parecer, la máxima "Nada en exceso" para guiar el comportamiento práctico de los hombres. Solón, que vivió entre 640 a. C y 559 a. C., se hizo famoso como legislador y reformador social en Atenas.

- Quilón de Esparta: al parecer, es autor de la máxima "No desees lo imposible". Político del s. VI a. C., intenta mejorar los sistemas para controlar mejor a los más altos funcionarios del estado. Asimismo, se le atribuye la militarización de la vida civil de Esparta y las primeras medidas para la educación castrense de la juventud.

- Bías de Priene: "La mayoría de los hombres son malos", indica la máxima atribuida a este político griego que alcanzó gran fama como juez en el s. VI a. C.

- Tales de Mileto: Filósofo y matemático, es considerado uno de los siete sabios de Grecia gracias a su sabiduría práctica, a su notable capacidad política y a la gran cantidad de conocimientos que poseía. La máxima que se le atribuye, que figura en el frontón del templo de Apolo en Delfos, es "Conócete a tí mismo" (Ver apartado dedicado a Tales en los filósofos presocráticos).

- Pitaco de Mitilene: fue un hombre de estado griego (h. 650 a. C.) que gobernó en Mitilene, Lesbos, conjuntamente con el tirano Mirsilo. Pitaco intentó mediatizar y debilitar el poder de la nobleza, y ejerció el poder apoyándose en las clases populares. El aforismo por el que se le conoce es "Debes saber escoger la oportunidad".

- Periandro de Corinto: como tirano de Corinto, intentó mantener la estabilidad política interna y propició la prosperidad del país durante el período entre los s. VII-VI a. C. Se ocupó de reglamentar y humanizar el trabajo de los esclavos, protegió a la clase social de los campesinos pobres y obligó a la nobleza a reducir la suntuosidad de sus gastos. Hacia el exterior, Periandro llevó a cabo una sistemática política colonial de conquistas. La larga estabilidad de que gozó Corinto bajo su mandato, contribuyó a que fuera incluido en el grupo de los sabios de Grecia.


3.4. El supuesto origen oriental de la filosofía

Según cierta tradición de pensamiento, que se remonta hasta los filósofos judaicos de Alejandría en el siglo I a.C, la filosofía griega procede de Oriente, de doctrinas hebraicas, egipcias, babilónicas e indias de donde los filósofos griegos habrían extraído sus concepciones. Si bien es cierto que los filósofos griegos, principalmente los presocráticos, viajaron a Oriente y Egipto para aprender y absorver las técnicas y conocimientos de aquellos pueblos, no parece plausible que, en lo referente a la filosofía, radicase en ellos el pensamiento más original y, sobre todo, más propiamente filosófico, que es el racional, pues toda sabiduría oriental estaba ligada a lo religioso y controlado por una casta sacerdotal encargada de transmitir dicha sabiduría intacta de generación en generación, exactamente lo opuesto, como veremos más adelante, de la actitud propiamente filosófica de los griegos. Es posible que quien afirmase que la filosofía griega tenía un origen oriental tratase de vincular ambas, reforzando de esa manera la sabiduría originaria y venerada que se le otorgaba a Oriente, con los logros de Grecia. A modo de ilustración del punto de vista de los propios griegos acerca de otros pueblos y de sí mismos, y sin pretender por ello extraer mayor apoyo para nuestra tesis, Platón manifiesta su opinión de la siguiente forma:

"En efecto, sería ridículo que ese carácter ardiente e indómito atribuido a ciertas naciones, como a los tracios, a los escitas y en general a los pueblos del norte o ese espíritu curioso y ávido de ciencia que con razón se puede atribuir a nuestra nación, o, en fin, ese espíritu de interés que caracteriza a los fenicios y a los egipcios tengan su origen en otra parte que en los particulares que componen cada una de estas naciones."

La República , Platón

Lo que sí podemos afirmar, como ya hemos mencionado, es la influencia de la ciencia egipcia y babilónica, si bien siempre resaltando (también lo haremos aquí en su momento) que ésta se ceñía a las aplicaciones prácticas y que no alcanzaba un grade de sistematización y de abstracción comparable al de la reflexión de los griegos. (4)




3.5. Fuentes de la filosofía griega, cronología y esquemas.

Nuestro conocimiento de la filosofía griega se basa, o bien directamente en las obras y fragmentos que nos han llegado, o bien de forma indirecta a través de citas y menciones que otros autores han realizado. Con respecto a los presocráticos las obras que han sobrevivido son muy escasas (el primer filósofo de quien se conservan las obras completas es Platón), por lo que hemos de valernos casi exclusivamente de los testimonios, que no siempre son de fiar. Todos estos testimonios indirectos, por lo que se refiere a los presocráticos, se clasifican a su vez en dos grupos. Por un lado las alusiones y citas que hacen Platón y Aristóteles , pudiendo considerar a este último el autor del primer ensayo de historiografía filosófica, pues en el primer libro de su Metafísica hace un repaso bastante extenso de las doctrinas anteriores (pero limitado en ocasiones ya que Aristóteles parece juzgar las teorías que le precedieron en función de la similitud con la suya propia, interpretándolas como pasos hacia su visión de la realidad, que él consideraba la correcta). Por otro lado contamos con los doxógrafos , es decir, aquellos escritores (que se corresponden con el útlimo periodo de la filosofía griega) que se dedicaron a recopilar las opiniones o las vidas de los filósofos ilustres. Entre los doxógrafos más famosos el primero de ellos fue Teofrasto, autor de unas Opiniones físicas , del cual se conservan un capítulo y otros fragmentos. Asimismo son importantes las doxografías de Plutarco y de Juan Estobeo (siglo V d.C.), como también los comentarios de Cicerón. Finalmente, son fundamentales el primer libro de la Refutación de todas las herejías , de Hipólito, en el siglo III d.C. y la obras de Diógenes Laercio Vidas de los filósofos más ilustres , también en el tercer siglo de nuestra era.(ver apéndice 1)

En 1903, Hermann Diels publicó una recopilación titulada Los fragmentos de los presocráticos , sucesivamente ampliada, que es en la actualidad el texto obligado de referencia. Con tan escasa base textual se comprende que el estudio de los presocráticos sea difícil y que las distintas interpretaciones se encuentren a menudo en conflicto (sobre este asunto véase el apéndice 2).

Cuadro resumen de las cosmovisiones prefilosóficas:

 

COSMOVISIÓN MITOLÓGICA (PREFILOSÓFICA)

 

•  Epopeya (siglo IX-VIII a.C?). Homero Ilíada , Odisea

•  Poesía teológica y didáctica (siglo VIII-VII a.C?) Hesíodo: Teogonía , Trabajos y díask.

•  Literatura órfica (siglo VI a.C.). Orfeo: Rapsodias o Discursos sacros.

•  Poesía astrológica (siglo VI a.C.). Pseudo-Hesíodo: Astrología .

•  Prosa cosmológica y gnómica (siglo VI a.C.): Ferécides: Teogonía , Arcesilao: Genealogías .

•  Los siete sabios : Apotegmas.


La siguiente tabla clasifica a todos los presocráticos conforme a tres criterios distintos, cronológicamente, por la escuela a la que pertenecieron, y en función del lugar del que proceden. Como se puede comprobar en el índice, nos hemos valido del segundo criterio, según las escuelas de pensamiento, para estructurar el tema. (En ocasiones, a la hora de fechar las vidas de los filósofos, en caso de que no consten datos precisos, se suele indicar la fecha de su florecimiento o acmé , que se corresponde aproximadamente con la edad de 40 años, a partir de los cuales se deriva cualquier otra fecha que viviese el pensador en cuestión).

CRONOLOGÍA

ESCUELAS

ORIGEN

 

•  Tales: 624-546
•  Anaximandro: 611-546
•  Anaxímenes: 586-525
•  Pitágoras: 580-500
•  Jenófanes: 570-480
•  Parménides: 540-470
•  Heráclito: 535-470
•  Zenón de Elea: 510-?
•  Meliso
•  Anaxágoras: 499-432
•  Empédocles: 492-432
•  Leucipo
•  Sócrates : 469-399 (5) •  Demócrito: 460-370

Filosofía monista

- Escuela de Mileto:

•  Tales
•  Anaximandro
•  Anaxímenes

- Escuela de Éfeso

•  Heráclito

- Escuela de Elea

•  Jenófanes
•  Parménides
•  Zenón
•  Meliso

Filosofía pluralista

- Escuela pitagórica
- Empédocles
- Anaxágoras
- Escuela atomista

•  Leucipo
•  Demócrito

Asia menor:

- Tales de Mileto
- Anaximandro
- Anaxímenes
- Heráclito
- Jenófanes
- Empédocles
- Anaxágoras
- Leucipo
- Demócrito

Sur de Italia

- Pitágoras
- Parménides
- Zenón
- Meliso





3.6. Características generales de la filosofía presocrática

A los primeros filósofos se les conoce como "filósofos presocráticos", pero tal vez la denominación no sea la más apropiada. Efectivamente, son filósofos en la medida en que son "amantes del saber" o "amigos de la sabiduría", tal y como indica la etimología de la palabra "filósofo" (que procede de filo - amigo, y sophos - saber). El término filósofo fue inventado por Pitágoras, quien afirmaba que la sabiduría plena sólo podían lograrla los dioses, mientras que los simples mortales debían conformarse con ser "amigos de la sabiduría", alguien que la admira y aprecia y por tanto la busca, pero la busca en la medida en que no la posee. El filósofo no está en "posesión de la verdad", acepta una teoría u otra en función de los argumentos, pero ha de estar dispuesto a cambiar su forma de ver las cosas si encuentra argumentos mejores a favor de otra teoría. En este sentido general del término es como hay que concebir a los presocráticos, los cuales fueron considerados en su tiempo como sabios, aunque también eran "sabios" los poetas, ciertos artistas, los médicos y los magos. Las distinciones que hacemos hoy día entre unos y otros no eran tenidas en cuenta en la antigua Grecia. De hecho, los presocráticos, a nuestros ojos, se presentan antes como científicos que como filósofos, pues uno de sus intereses fundamentales fue el de dar una explicación del funcionamiento del mundo (tarea que hoy asociamos con la ciencia, pero que tampoco se diferenciaba entonces de la filosofía). Volviendo al análisis del nombre con que son designados estos filósofos, con respecto al calificativo de "presocráticos" también cabe hacer ciertas aclaraciones, ya que no todos son anteriores a Sócrates. Algunos de ellos son contemporáneos, y Demócrito murió mucho más tarde.

No obstante, y a pesar de estas aclaraciones, la denominación de "filósofos presocráticos" tiene su sentido y su razón de ser, ya que todos ellos tienen en común un mismo objetivo: encontrar una explicación del mundo y la naturaleza. Hallar un principio subyacente a toda la variedad y multiplicidad de cosas que observamos que pueda explicar de forma sencilla el universo. Pretenden saber cuál fue el origen y como está constituido el cosmos, pero, a diferencia de las explicaciones tradicionales, sin apelar a recursos míticos o religiosos, sino por medio de la razón. Tratan de determinar el "principio" (arjé) último y eterno del que todo procede y del que todo se compone. Su interés fundamental, por lo tanto, es descubrir las leyes de la naturaleza. Ellos usaban el término physis . ¿Qué significa physis , exactamente? Se trata de un vocablo con las siguientes acepciones:

-El elemento o materia originaria (o arjé , principio) de que todo está compuesto, de donde todo procede y a donde todo vuelve.

- La estructura de las cosas, el principio de organización interna de la realidad.

- También, pero rara vez, génesis, proceso de generación.

- En los filósofos siguientes -especialmente Aristóteles y los estoicos- adquirirá nuevas significaciones. La significación de physis como la totalidad de lo que existe aparece a mitad de siglo V. Los primeros filósofos usaban expresiones como "las cosas", "el mundo", "todo", etc.

En la búsqueda de la physis o arjé de las cosas, los primeros filósofos emplean un estilo antitético de pensamiento (contraposiciones) que se muestra en la tendencia a hacer agrupaciones por pares de contrarios (frío/caliente, húmedo/seco, etc.) y a plantear los problemas en forma de dilemas, como: lo uno o lo múltiple; inmutabilidad o movimiento; lleno o vacío; indivisible o divisible, etc.

Todos ellos viven en las colonias de Jonia o Italia meridional, aunque la mayoría de ellos realizaron viajes entre las ciudades prósperas del Mediterráneo. Precisamente la división geográfica entre Jonia o Italia marca también el desarrollo de dos escuelas de pensamiento o tradiciones filosóficas distintas, en las cuales, con ciertas reservas, es posible agrupar a los primeros filósofos:

1. La tradición científica jónica: Estos filósofos son también llamados "físicos", puesto que su interés se centra en la Naturaleza ( physis ). Se inspiran, probablemente, en elementos tomados de la ciencia egipcia y mesopotámica. Substituyen las representaciones antropomórficas de los mitos por elementos naturales, y elaboran cosmologías de corte científico-filosófico. Esta tradición concluye con Demócrito, tiene una notable manifestación en la medicina hipocrática, y se renovará más tarde con Epicuro.

2. La tradición mística itálica: La tendencia de estos filósofos es más bien "metafísica" (aunque la palabra no existía todavía) y religiosa. Influenciados por el movimiento órfico, adquirieron muchas de sus tesis (como la separación del alma y el cuerpo y el rechazo de éste) y su influencia en la cultura occidental por medio de la filosofía de Platón, ha sido inmensa. El pitagorismo, además de sus aspectos científicos, filosóficos y místicos, representa también un movimiento político de carácter conservador. Parménides y su escuela -aunque difieren en mucho de los pitagóricos- se pueden incluir también aquí.





NOTAS:

(1) La cual sería la nuestra, naturalmente

(2) Permítaseme añadir que su cohabitación no es algo del pasado exclusivamente. De hecho, la presencia de mitos, supersticiones y prejuicios es todavía más chocante en nuestra tiempo, puesto que vivimos en una época informada. Encontraríamos absurdo a un científico que, para argumentar a favor de sus ideas, apelase a las emociones de los oyentes, y no a su capacidad de juicio, que se basase en una "tradición milenaria" o que afirmase de forma vaga y ambigua que son muchas las cosas que ignoramos (como si ese hecho supusiese una base para defender una afirmación concreta). Y sin embargo, es lo que hacemos y permitimos en la política, en ciertas prácticas médicas poco corroboradas o al aceptar fenómenos extraños sin espíritu crítico, desde la astrología o el tarot a las abducciones extraterrestres o la religión. Estos mitos, y otros no formulados explícitamente sobre la sociedad o el ser humano, siguen siendo parte de la forma de ver el mundo y de la vida cotidiana de muchas personas (¿es acaso inevitable o se trata éste de un mito más?)

(3) Existen varias listas con distintos miembros. En algunas figura omo uno de los sabios Misón de Queronea , a quien se le atribuye la máxima "investiga las palabras a partir de las cosas, no las cosas a partir de las palabras".

(4) A este respecto es interesante sacar a colación las diferentes valoraciones que lo teórico y lo práctico ha tenido a lo largo de la historia. Hoy en día es un lugar común afirmar la importancia de lo "práctico", hasta un punto, tal vez, exagerado, en la medida en que se llega a afirmar que sólo lo útil tiene valor, pero como afirma el filósofo inglés Bertrand Russell: "Si queremos impedir que la vida humana se comvierta en algo insípido y tedioso, es importante darse cuenta de que hay cosas que tienen un valor completamente independiente de su utilidad. Lo útil es útil porque es un medio para alguna otra cosa, y esa otra cosa, si no es a su vez simplemente un medio, debe valorarse por sí misma, ya que, de otro modo, la utilidad es ilusoria." Al excesivo énfasis en lo práctico que critica Bertrand Russell le corresponde en ocasiones una excesiva valoración de la especulación cuando está considerada como un valor absoluto y va acompañada de un cierto desprecio por las actividades "prácticas", como fue el caso del matemático G. H. Hardy en su escrito autobiográfico "Apología de un matemático", en el que se jactaba de que su trabajo, estudios en la teoría de números, "no servía para nada" (si bien no llegó a ver las aplicaciones que la teoría de números llegaría a tener en la codificación de mensajes secretos pocos años después de su muerte).

(5) Sócrates, naturalmente, no es un presocrático, pero figura en la lista como punto de referencia cronológico para los demás.


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© José Sánchez-Cerezo de la Fuente 2004


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